La linaza es una
semilla cuyo consumo se ha venido popularizando y no es en vano, a continuación
se resumen las propiedades medicinales de este alimento y las formas en que
debe ser consumido con el fin de obtener los beneficios deseados.
En primer lugar,
la linaza entera es muy efectiva en el manejo de alteraciones digestivas como
la gastritis, el colon irritable y el estreñimiento. Esto es debido a que la
linaza tiene un altísimo porcentaje de fibra dietética, lo que ayuda a mejorar
al tránsito intestinal. Además, cuando la linaza se deja reposando en agua
produce una “babita” llamada mucílago; dicho mucilago refresca y ayuda en la
curación de lesiones o inflamaciones tanto en la mucosa gástrica como en la
mucosa intestinal, además de actuar como lubricante natural, lo que contribuye
en el manejo y prevención del estreñimiento.
En segundo
lugar, la linaza contiene ácidos grasos omega 3, 6 y 9. El omega 3 es un tipo
de grasa que el cuerpo no produce y por lo tanto se debe consumir en la dieta
es de gran importancia debido a que tiene propiedades antiinflamatorias y
contribuye al adecuado funcionamiento de articulaciones, músculos, del sistema
nervioso, entre otros. La linaza es el
alimento vegetal con más omega 3 de la naturaleza. Para obtener la mayor
cantidad de omega 3 se recomienda consumir el aceite de linaza.
Por último, la
linaza tiene una cantidad de compuestos fitoquimicos, proteínas, minerales,
vitaminas y antioxidantes. Entre ellos están los lignanos que son compuestos
que actúan como estrógenos naturales contribuyendo en el manejo de la
menopausia e incluso de los cánceres dependientes de hormonas como por ejemplo
el cáncer de mama. Además contiene los 8 aminoácidos esenciales, vitaminas E, C
y B, potasio, magnesio, calcio, entre otros. Para adquirir todos estos
beneficios es más recomendable la linaza molida, que es de más fácil digestión
y asimilación en el cuerpo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario